El Fénix Geométrico
El resurgir del astrolabio en el siglo XXI.
Podríamos consignar la invención del astrolabio dentro de la evolución lógica de las estructuras y artefactos diseñados para la navegación celeste, la medición del tiempo y la predicción de efemérides astronómicas, que abarcan desde las configuraciones megalíticas prehistóricas (por ejemplo, las del tipo crómlech o en forma de anillo, como Stonehenge) hasta el más moderno sextante y el actual dispositivo GPS. El astrolabio puede entenderse, por tanto, como un eslabón clave en la historia de la medida y la computación, dadas sus múltiples funciones y complejidad. Hoy, en pleno siglo XXI, cuando la tecnología humana ha alcanzado tan extraordinario nivel de desarrollo, que incluso nos ha permitido llegar a otros mundos, el conocimiento y uso de un instrumento de navegación antiguo como el astrolabio podría considerarse obsoleto y, como mucho, curioso. Sin embargo, aún puede resultar muy útil en determinados contextos, que abarcan desde el didáctico hasta el de supervivencia. Y es que, su amplio abanico de funciones y el hecho de que no «vaya a pilas», lo convierten en un objeto que no solo nos permite comprender mejor el funcionamiento del cielo y predecir efemérides, sino también realizar ciertas mediciones que podrían sacarle de un apuro.
Joel Núñez Fernández, es fundador y diseñador de Astronomads Instruments
(www.astro-nomads.com), y gestor del Departamento de Astronomía en la Escuela Española de Supervivencia EESB.
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Astronomía Julio Agosto 2021 No 265-266- Edición digital
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