Nueve años después SpaceX lanza el cohete Falcon 9
El 8 de julio de 2011, a las 11:26:46 hora de Florida, despegaba de la rampa 39A del Centro Espacial Kennedy el último vuelo del transbordador espacial, el STS-135 Atlantis, con cuatro astronautas a bordo. Desde entonces han tenido que pasar casi nueve años para que una nave tripulada estadounidense despegase de nuevo desde esa misma rampa 39A. Tras la finalización del programa del Space Shuttle, casi nadie se imaginaba que iba a transcurrir casi una década hasta que los Estados Unidos fuesen capaces de construir y poner en órbita un nuevo vehículo tripulado.
El lanzamiento del cohete Falcon 9 de la empresa privada SpaceX, con su flamante cápsula Crew Dragon embarcando a dos astronautas de la NASA rumbo a la Estación Espacial Internacional se produjo sin incidentes el pasado 30 de mayo, tras años de pruebas, vuelos de demostración sin tripulación, e incluso fallos explosivos. Tras 19 horas de vuelo, la Crew Dragon, bautizada Endeavour por Douglas Hurley y Robert Behnken, comandante y piloto a bordo, se acopló automáticamente en el puerto de amarre frontal del módulo Harmony de la ISS, incorporándose ambos veteranos astronautas, con tres vuelos espaciales cada uno, a la tripulación número 63 de la Estación.
Este es un hito significativo, pues no solo supone que los EE. UU. recuperan la capacidad de poner astronautas en órbita de manera independiente –recordemos que hasta ahora dependían de las cápsulas Soyuz rusas para ello–, sino que abre toda una nueva etapa en el acceso al espacio, ya que SpaceX, a pesar de haber sido fuertemente subvencionada por la NASA para este programa, es una empresa privada, demostrando que el poner seres humanos en el espacio ya no es patrimonio exclusivo de las agencias gubernamentales. Y los planes al respecto de Elon Musk, el dueño de SpaceX, son tremendamente ambiciosos. Se avecinan tiempos interesantes…