Experiencias de los lectores
Los lectores de la revista nos mandan en ocasiones sus propias experiencias de productos astronómicos, y en esta ocasión compartimos dos de ellas: una comparativa de dos instrumentos solares en H alfa, y la prueba de una columna de soporte para monturas telescópicas.
Cuando observamos el Sol a través de un filtro de objetivo o un prisma de Herschel, podemos contemplar la actividad que se desarrolla en la fotosfera. Sin embargo, es en la siguiente capa conocida como la cromosfera donde se desarrollan los fenómenos más espectaculares como son las protuberancias, los filamentos o las fulguraciones. Hasta muy recientemente, este campo de observación ha estado vetado al aficionado medio por el alto coste del equipo necesario. Fue primero Coronado y posteriormente Lunt los que pusieron a disposición del observador filtros y telescopios dedicados a un coste razonable. Por último, Daystar lanzó al mercado un accesorio que permitía observar el Sol en hidrógeno alfa, situándolo en el portaoculares de cualquier telescopio convencional. En la primera parte de este artículo compararemos el funcionamiento visual de dos de los equipos más modestos existentes en el mercado para la observación de la cromosfera: el Quark Daystar y un telescopio dedicado Lunt de 60 mm de abertura.
Rafael Barragán y Francisco Soldán
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Astronomía Diciembre 2021- Edición digital
Astronomía Diciembre 2021 No 267- Edición Impresa