EL CIELO DEL MES DE ABRIL DE 2024

 

Calendario astronómico de abril de 2024

Tras la entrada de la primavera el pasado mes de marzo, seguimos disfrutando de días cada vez más largos en el hemisferio norte. Por el contrario, en el hemisferio sur los días se acortan a medida que avanza el otoño. En Madrid, el 15 de abril el Sol sale a las 7:36 y se pone a las 20:54, hora peninsular española, dando lugar a algo más de 13 horas de luz. La Luna empieza este mes en cuarto menguante y, por tanto, en los primeros días del mes solo podremos encontrarla en el cielo de noche durante las últimas horas antes de la salida del Sol. Cuando empiece su fase creciente de nuevo, tras la Luna nueva del día 8, empezará poco a poco a dominar los anocheceres hasta alcanzar su fase llena el día 24 de abril.

Este mes nos trae también un buen número de bonitas conjunciones. Para empezar, el día 6 una fina Luna menguante se aproxima a Saturno y Marte con la constelación de Acuario como telón de fondo (Figura 1). Este acercamiento será visible minutos antes de la salida del Sol, a una elevación muy baja, por lo que para observarlo tendremos que contar con un horizonte despejado.

Marte y Saturno seguirán siendo protagonistas en los amaneceres del cielo de abril. Durante los primeros días del mes, y tras su conjunción con la Luna, ambos planetas se seguirán observando muy juntos, aunque ya lejos de nuestro satélite natural, antes de perderse por el brillo del alba. Su máximo acercamiento es el 11 de abril (Figura 2), entre dos estrellas de la constelación de Acuario y bajo lo que sería el flujo de agua de este personaje de la mitología griega.

Durante la segunda mitad del mes, Marte y Saturno se irán alejando poco a poco, pero nuestro vecino planeta rojo visitará otro de los gigantes gaseosos justo antes de cerrar el mes. El mencionado afortunado será el helado Neptuno y Marte casi lo rozará en el cielo. Ocurrirá bajo la constelación de Piscis justo antes del amanecer del 29 de abril (Figura 2). Sin embargo, dada la baja elevación y el brillo del crepúsculo matutino, será prácticamente imposible contemplar esta conjunción y, en cualquier caso, solo si contamos con un telescopio.

Tras su fase nueva el día 8, una finísima Luna creciente volverá a regalarnos otra conjunción. Será el día 10 con los otros planetas gigantes, Júpiter y Urano (Figura 3). Lo hará al anochecer, entre las constelaciones de Aries y Tauro, antes de desaparecer por el horizonte oeste después de la puesta de Sol. Aunque la estampa del brillante Júpiter con la esbelta Luna será por sí sola fascinante, para disfrutar del gigante helado Urano necesitaremos unos prismáticos o un telescopio, al igual que ocurre con la aproximación de Marte y Neptuno este mismo mes.

Júpiter y Urano seguirán recorriendo el cielo muy juntos durante el resto del mes, siendo su mayor acercamiento hacia el 20 de abril (Figura 4). De nuevo, esto ocurrirá en el horizonte oeste, tras el ocaso y a una elevación extremadamente baja.

Durante la segunda mitad de abril tendremos también en el cielo las Líridas. El máximo de esta lluvia de estrellas se espera para la mañana del 22 de abril, casi coincidiendo con la salida del Sol. Además, durante la noche del 23 al 24 de abril tendrá lugar la Luna llena, por lo que el brillo de nuestro satélite natural estos días tampoco facilitará mucho su observación. Para tratar de avistar algún meteoro, lo mejor es buscar la constelación de la Lira, que es la región de donde proceden (de ahí su nombre). Aunque esta constelación no es muy grande, la podemos identificar fácilmente si encontramos a la brillante Vega, que es la estrella más brillante de esta constelación y también uno de los vértices de lo que conocemos como el Triángulo de Verano. Sin embargo, el asterismo que destaca estos meses es más bien el Triángulo de Primavera, que está formado por las estrellas Arturo, Espiga y Régulo, todas muy brillantes en los cielos de estas noches.

Pero el evento astronómico por excelencia de este mes es el eclipse de Sol que tendrá lugar el 8 de abril. Aunque desde España no podremos observar la totalidad del eclipse, el cual sí será visible desde América del Norte (ver páginas 46-47 de esta revista), sí podrán disfrutarlo parcialmente aquellos que se encuentren en Galicia o en las islas occidentales del archipiélago canario (todas salvo Fuerteventura y Lanzarote), ver Figura 5. En cualquier caso, incluso desde esas zonas, será un eclipse parcial de muy baja magnitud. En Santa Cruz de Tenerife, por ejemplo, el máximo del eclipse se producirá a las 21:02, hora local. Para poder observar un eclipse total de Sol desde España habrá que esperar algo más de dos años, hasta el 12 de agosto de 2026.

Texto e imágenes:  Observatorio Astronómico Nacional-IGN, https://astronomia.ign.es