En este artículo se presenta el nuevo instrumento del telescopio IAC 80, una cámara de gran campo dotada con un avanzado sensor con una resolución de 102 megapíxeles.
Desde los albores de la astronomía, esta ciencia ha estado marcada por la evolución de instrumentos que hacen uso de la tecnología fotográfica. La introducción de la placa fotográfica a comienzos del siglo XX permitió obtener las primeras imágenes del firmamento, generando una auténtica revolución en el campo debido a su capacidad para captar amplias zonas del espacio con alta resolución. Sin embargo, a pesar de estas ventajas, su eficiencia limitada y la complejidad asociada tanto en la captura como en el análisis subsiguiente, condujeron a un declive considerable de su uso a partir de los años 1980, sin lograr progresar tecnológicamente en el ámbito de los instrumentos astronómicos.
La llegada de los dispositivos digitales en la misma década, conocidos como Dispositivos de Carga Acoplada o CCD por sus siglas en inglés, resolvió los principales obstáculos presentes en las placas fotográficas: la eficiencia en la detección y la respuesta lineal a la luz. Además, proporcionó una mayor simplicidad en la captura y el procesamiento gracias a su conversión analógico-digital. Los CCD son sensores manufacturados en silicio, compuestos por unidades fotosensibles denominadas píxeles. Desde ese entonces, el desarrollo y perfeccionamiento de los dispositivos CCD los ha consolidado como la opción predominante en la confección de instrumentos astronómicos.
David Nespral
Artículo completo en la revista de septiembre de 2023.